Entre gustos y sabores no han escrito los autores… esa es una frase que solemos conocer, pero hoy haremos caso omiso a ella y vamos a hablar de sabores. La lengua es nuestro órgano receptor del gusto, ella se encarga de percibir todo lo que ingerimos y manda al cerebro diversas señales. Es el equivalente a un transductor eléctrico capaz de reaccionar según diversas magnitudes. Ahora bien, veamos cuáles son los sabores y cómo incluirlos en los regalos de empresa.
Los sabores básicos son: dulce, amargo, salado y acido… siendo el dulce uno de los más consumidos por todos. Uno que es poco conocido es el umami y en culturas como la india se puede percibir el picante y astringente. Si seguimos expandiendo el gusto, podemos abrir la posibilidad a dos nuevos sabores como el starchy y adiposo.
La ciencia se encarga de explorar en todos los sentidos, la cocina y los sabores no han escapado de ello. Seguramente en la escuela todos aprendimos que había nueve planetas y recientemente la lista ha crecido. Algo similar ha pasado con los sabores que pasaron de ser cuatro básicos a una lista que sigue en aumento.
En este post vamos a citar algunos alimentos de ejemplos con cada uno de los sabores.
Tipos de sabores en regalos de empresa
La verdad es que siempre han existido estos sabores; la única diferencia es que ahora los clasificamos de mejor manera y podemos dar una descripción más específica.
1 . Sabor dulce
Las papilas gustativas son las principales encargadas de detectar las moléculas que nos apuntan a lo dulce: los azúcares y edulcorantes. Aunque se encuentran en gran cantidad en la parte delantera, también las apreciamos a lo largo de la lengua y en gran cantidad al final. Estas papilas están especialmente desarrolladas en la niñez, probablemente por alguna relación evolutiva.
Podemos encontrar azúcar en casi todos los alimentos, pero principalmente en helados, refrescos, postres, pastelería y chuches. El sabor dulce será sin duda muy preciado en sus regalos de empresa.
2. Sabor salado
Este sabor es tan común como el anterior, ha estado presente desde tiempos remotos; de hecho la palabra salario proviene de la práctica antigua de pagar con sal por una jornada de trabajo. La sal se emplea desde tiempos ancestrales por sus propiedades para conservar los alimentos. Antes de pensar en refrigeradores, nuestros ancestros decidieron salar los alimentos. De hecho el jamón ibérico viene como una respuesta a la conservación de la carne de cerdo; y es bien sabido que el primer paso de un jamón es la salación.
La sal es importante, aporta sodio y otros minerales, pero su consumo debe ser moderado. Comúnmente ingerimos una dosis mayor a la que necesitamos y esto nos trae problemas a futuro. Casi todos los alimentos la incluyen, incluidos los dulces; generalmente tienen un toque de sal para destacar su sabor y aumentar su preservación. El salado no debe faltar en tu selección de regalos empresa. Algunos ejemplos de los sabores salados son aperitivos como patatas, frutos secos o comida como hamburguesas o perritos calientes.
3. Sabor amargo
Lo amargo no siempre es malo, podemos apreciar este sabor en la cerveza, el café, tónicas, quesos y algunos vegetales. Incluso el chocolate puede incluir este sabor, ya esto nos hace pensar que no todo es malo y que podemos incluirlo en nuestra lista de regalos empresa.
En los seres humanos, las papilas gustativas, las que están principalmente en la parte posterior de la lengua, están especialmente desarrolladas y se encargan de detectar los sabores amargos.
4. Sabor ácido
El sabor ácido y el sabor amargo guardan una relación muy estrecha, el cuerpo está entrenado para percibirlo por razones similares al amargo. ¡Una cuestión de supervivencia! Este sabor nos hace segregar saliva; uno de los productos que más se relaciona con el sabor ácido es el limón o el jugo de limón.
También en naranjas, algunas manzanas verdes que son más fuertes, vinagre, tomates u otros. Es un sabor que ayuda a contrastar el salado y dulce; algunas alimentos ricos en grasas pueden contener un poco de ácido para contrarrestar el sabor dulce o salado. Por ejemplo, el vinagre que se suele utilizar en las ensaladas se utiliza para disminuir el aceite, el limón en la salsa ali oli o las patatas fritas en kétchup para disminuir el sabor al aceite.
5. Sabor Umami, el sabor que no debe faltar en tus regalos empresa
Una cesta de regalos para empresas que no incluya este sabor con productos como el jamón no proviene de una empresa de España, ya que es un producto típico que se suele añadir en todas las cestas de regalo. Se trata nada más y nada menos de sabores como el jamón. El umami viene del japonés y cabe perfecto dado que significa “sabroso”. En 1908 fue identificado y bautizado por Kikunae Ikeda. Además, se puede agrupar en esta misma categoría las anchoas, salsa de soja o espárragos.
Es un sabor que tiende a ser sutil, pero a su vez desprende un gusto prolongado en el paladar, acelera la salivación; se siente un poco aterciopelado y estimula la garganta y la parte posterior de la boca.
Definitivamente, los sabores son mágicos, cada sabor puede producir sensaciones muy distintas en cada una de las personas. Incluye en tus regalos de empresa sabores menos conocidos que aportan originalidad y buenos productos al regalo. Además, todos quedarán encantados. ¡Visita nuestra web!